Debemos saber que todo proyecto educativo debe ser realista, ya que no podemos enseñar a esquiar a un bebé de meses que todavía no sabe andar, ni enseñar operaciones matemáticas muy complejas a un niño de cuatro años.
La razón estriba en que ni su mente ni su cuerpo (física o cognitivamente) está preparado para ello, y sería inútil intentarlo. De igual modo debemos saber que, por ejemplo, para montar en bicicleta siempre habrá tiempo, aunque le resultará más fácil aprender a un niño de cuatro años que a una persona de cuarenta años.
Un alumno, cuando le preguntaron qué quería estudiar al año siguiente en la Universidad, contestó muy acertadamente: ¿qué se puede estudiar? Al igual que al ir a un restaurante miramos en la carta todos los platos y elegimos, no pedimos el primero que aparece, el adolescente debe conocer toda la relación de estudios existentes en el mercado, en qué consiste cada uno, lo que abarca, qué salidas tendrá, dónde se encuentran las facultades....
Contamos de antemano con que la fuerza de voluntad mueve montañas. Pero, ¿no sería mejor facilitarles las cosas a nuestros hijos para que su aprendizaje fuese más placentero que sufrido? Citando a Fernando Corominas y refiriéndome a los Períodos Sensitivos quisiera poner en el camino una educación lo más práctica e integral posible, donde formemos a nuestros hijos en todas sus capacidades (físicas, intelectuales y de voluntad).
Podemos dar pautas a los niños en muchos campos e iniciarles en ellos. Pero, una vez ellos se ven con unas destrezas o con unos gustos, el día de mañana, la educación que han adquirido tiene haberles capacitado para elegir lo que deseen, partiendo siempre del conocimiento.
Educar en positivo, según la edad del niño
Partiendo del conocimiento de los Períodos Sensitivos podremos plantear un Proyecto Educativo con objetivos a corto, medio y largo plazo sin agobios y con la tranquilidad de estar educando en positivo.
Trabajar la música
Aprender a hablar
Aprender idiomas
Trabajar la memoria
Fomentar la lectura
Escritura
Cálculo mental
Habilidades básicas del pensamiento
Juegos simbólicos, juegos de reglas y estrategias
Orden
Sinceridad
Obediencia
Generosidad, justicia, afán de superación, compañerismo, responsabilidad, laboriosidad...
Pudor, amistad, templanza
Ayuda a los demás
Solidaridad, justicia social
Más destrezas que pueden adquirir los niños con los años
¿Qué es la destreza? Es la habilidad unida a la experiencia, en la realización de una actividad determinada, de una forma sencilla, rápida y eficiente.